Después, presentando a Kiev un plan bastante realista para un alto el fuego o una paz más duradera. Y, más recientemente, echando a los agentes de inteligencia occidentales de Twitter, haciéndose pasar por guardianes de la pureza moral de la red.

Musk, como es sabido, hizo una encuesta entre los clientes de la red para ver si el actual sistema de censura y bloqueo de cuentas por motivos ideológicos era aceptable para ellos. Resultó que no era así, por lo que Twitter comenzó a desbloquear gradualmente a los clientes prohibidos. Ya ha desbloqueado a Trump, aunque él todavía no lo utiliza.

Pero Musk no ha dejado de vigilar la red. Acaba de contratar a nuevas personas para vigilarlo, sin ninguna conexión evidente con los servicios secretos.

Ha desideologizado la vigilancia, centrándola en lo que se supone que es: detectar a los desviados que llenan la red de posts pedófilos, necrófilos, caníbales, pornográficos, etc., bloquear los contenidos relacionados con el tráfico de drogas, carnes blancas, armas... -y, por supuesto, evitar que los terroristas internacionales abusen de la red.

Musk, al desideologizar Twitter, se ha alzado con la impronta de la soldadesca internacional. Los liberales fanáticos, los ecologistas militantes, los sexistas, los promotores del multiculti, del LGBTI y de la afluencia masiva de inmigrantes de África y Asia, los rusófobos, los chinófobos y demás, los guerreros del progreso de la humanidad, se enfadaron debidamente con Musk.

De repente han perdido un aliado en la batalla informativa con el conservadurismo, con el cristianismo, con los defensores de las culturas nacionales tradicionales, con los patriotas, con los defensores de la estructura familiar tradicional, con los luchadores contra el asesinato de niños no nacidos, con los defensores de la migración regulada, con los que no les gusta la publicidad rimbombante de cada acción militante LGBTI, con los partidarios de la normalidad, la moral natural y la paz social.

Musk se hizo enemigo de los "soros". Se ha convertido en una presa para ellos. Un enemigo público a la manera de Julian Assange. Y no lo van a dejar que se salga con la suya. Es muy probable que estén tramando algo. Las estructuras extremadamente liberales de Bruselas ya han anunciado que si Musk no cede y empieza a censurar su red según los criterios de los "soros" , su red de twitter será prohibida en los países de la Unión Europea.

La prohibición de Twitter en la UE no será un asunto sencillo. Todavía hay muchos opositores a esas prácticas totalitarias, intolerantes y fascistas en la UE. Musk tiene suficientes buenos abogados y grupos de presión para evitarlo. Que lo defienda es otra cuestión. Por eso, el Sunshine International seguramente tiene otras opciones en reserva. Musk puede acabar como Assange. Se le acusará de desviaciones sexuales, de violaciones que tuvieron lugar hace 30-45 años..., de pederastia, de racismo /Musk es un sudafricano blanco/ etc. O le harán un fraude fiscal. O la divulgación de secretos militares y la traición. Los "soros" tienen una rica imaginación cuando acusan a sus enemigos...

Entonces, ¿qué va a ser? Nos sorprenderá.

Fuente: https://www.czechfreepress.cz/dalsi-blogy/elon-musk-sexualny-deviant-ci-danovy-podvodnik.html